Santo Domingo, 9 ago (INS).- La Arquidiócesis de Santo Domingo suspendió al sacerdote Elvin Taveras Durán, a quien señalan por la muerte a martillazos del adolescente Fernelis Carrión Saviñón, de 16 años, en un hecho ocurrido en el municipio Santo Domingo Norte.
“Establecemos la medida cautelar de retirar del ejercicio del Ministerio Sacerdotal (suspensión “Ad Divinis” Canon 1935) al padre Elvin Taveras Durán, se informó en un comunicado, en el cual la Iglesia católica pide a las autoridades que “basados en la verdad de los hechos, apliquen las sanciones previstas en el Código Penal”.
“Aseguramos a las autoridades nuestra colaboración en toda la investigación y el proceso judicial”, dice la Arquidiócesis de Santo Domingo.
El sacerdote Taveras Durán servía en la parroquia San Nicolás de la urbanización Máximo Gómez, de la comunidad Villa Mella.
“Acompañamos en su dolor a la familia Carrión Saviñón, a la cual le expresamos nuestra cercanía, le pedimos perdón y les aseguramos nuestras oraciones”, manifiesta el comunicado.
Asimismo, la Arquidiócesis invitó a todas las parroquias, comunidades, movimientos e instituciones católicas a unirse en oración permanente por la víctima, sus familiares y por los feligreses de las parroquias Santa Cecilia y Nuestra Señora de Fátima.
“Al mismo tiempo imploramos del Señor la fuerza para seguir sirviendo al pueblo de Dios”, dice el documento.
Por otro lado, la procuradora fiscal de Distrito Nacional y la directora del Departamento de Violencia de Género, Ana Andrea Villa Camacho, declaró este miércoles que si los padres o personas en rol de autoridad permiten que ocurra un delito sexual y no lo denuncian, pueden ser acusados de complicidad.
“Si yo estoy viendo y tengo conocimiento de que se está cometiendo un delito en contra de un menor de edad, y yo no lo he denunciado, que no necesariamente es el caso que nos ocupa, se da que muchas veces los padres, abuelos o tutores callan el delito porque reciben dádivas o se hacen de la vista gorda”, dijo.
Villa Camacho agregó: “Pero usted está consciente que ese delito ocurre, por qué usted no lo denunció por qué permitió que lo abusaran, por qué permitió que jugaran con su moral. Callar no solo viola la ley, también viola derechos fundamentales”.
La fiscal indicó que una relación entre un adulto y un menor de edad es un abuso y no califica como relación, sino como abuso sexual.
Freddy Carrión, padre de la víctima, declaró a medios de comunicación que el sacerdote le vivía dando dinero a su vástago “y se llenó de celos porque el hijo mío publicó fotos de la novia en Facebook”. INS
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