P. Rico-CDC alerta sobre efecto discriminatorio de la propuesta eliminación de la Ley 80

San Juan, 11 jun (INS).- La presidenta de la Comisión de Derechos Civiles (CDC), Georgina Candal Segurola, alertó hoy sobre el efecto discriminatorio entre las personas de edad avanzada y de las mujeres en el campo laboral de aprobarse la propuesta que eliminaría la Ley 80.

Candal Segurola recordó el derecho al trabajo es un derecho humano reconocido por los organismos internacionales, así como el derecho a una vida digna.

“La Rama Legislativa debe considerar los efectos discriminatorios y onerosos que sobre estos grupos particulares de personas en situación vulnerables tendrá esta legislación así como otras medidas de austeridad”, declaró la exjueza superior.

Sobre el caso, citó la Declaración Universal de Derechos Humanos aprobado en la Organización de Naciones Unidas en 1948 que establece en su artículo 23 el derecho al trabajo y en el 25 el derecho a un nivel de vida adecuado.

Asimismo, mencionó el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos aprobado en diciembre 16 de 1966 en el artículo 2 y el 25, que prohíbe la discriminación por raza, sexo y de otra índole.

“No existe duda de que la eliminación de la Ley 80 perjudicará más a los trabajadores de mayor edad y a las mujeres. El efecto devastador del desempleo en la actual economía puertorriqueña se vería aumentada por la eliminación de la Ley 80 cómo protección básica de los trabajadores de estos dos grupos”, aseguró la presidenta del organismo público que vela por los derechos humanos de los ciudadanos en Puerto Rico.

Para sustentar su argumento hizo referencia al Informe sobre Desarrollo Humano Puerto Rico 2016, publicado por el Instituto de Estadística el pasado mes, que señala que entre septiembre y octubre del 2017 desaparecieron 31,600 empleos asalariados no agrícolas, según información provista por el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos.

“Podemos citar estudios tras estudios y todos demuestran lo mismo, que la eliminación de esta Ley sería un elemento devastador y abonaría aún más a los niveles de pobreza que aumentaron de un 44.3% a 52.3% después de los Huracanes Irma y María”, apuntó.

Añadió que con ese cuadro de la pobreza en Puerto Rico y la realidad de que más del 94% de los casos de custodia de menores se adjudican a las madres, “se abona a perpetuar la discriminación laboral por género, pues muchos patronos discriminan (ilegalmente) contra las mujeres madres en el mercado laboral porque tiene mayor peso en la crianza, según lo destaca el Informe sobre Desarrollo Humano. Con esto se estará perpetuando no solamente el desempleo y la pobreza de las mujeres, sino también el de los menores que están bajo su custodia”.INS
lp