EEUU-Cerca de 54,000 hispanos han sido asesinados con armas en el país desde 1999 y dos tercios de estas muertes han sido homicidios, concluye estudio

Washington, 1 mar (INS).- Entre 1999 y 2015, cerca de 54,000 hispanos fueron asesinados con armas en los Estados Unidos, con un promedio anual de más de 3,100 muertos por armas, indica un nuevo estudio del Violence Policy Center (VPC).
La investigación también encontró que la tasa general de victimización por homicidio para hispanos es casi el doble de la correspondiente a gente de raza blanca.
En 2015, 70 por ciento de las víctimas hispanas de homicidio murieron por disparos de arma de fuego.
Para hispanos entre 15 y 24 años de edad, el homicidio se ubicó como la segunda causa principal de muerte.
Además, los hispanos suelen ser asesinados por gente que no conocen.
El estudio del VPC titulado “Víctimas hispanas de violencia letal con armas de fuego en los Estados Unidos” (http://www.vpc.org/studies/hispanicesp18.pdf), en su cuarta entrega anual de nuevo analiza exhaustivamente la violencia con armas de fuego letal que se ejerce en contra de los hispanos en los Estados Unidos.
Además, se basa en datos provenientes de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, siglas en inglés), instituciones de carácter federal, así como en información no publicada del Informe Suplementario sobre Homicidios (Supplementary Homicide Report) de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
El estudio encontró que de los 53,788 hispanos muertos con armas de fuego entre 1999 y 2015, las dos terceras partes correspondieron a homicidios (35,553, o 66 por ciento), mientras que 15,593 fueron suicidios (29 por ciento).
Asimismo, 981 muertes por armas de fuego fueron no-intencionales (dos por ciento) y 1,661 (tres por ciento) ocurrieron en situaciones cuya intención no se pudo determinar o por intervención legal.
“Para los hispanos, los estragos letales de la violencia con armas de fuego, sobre todo para los jóvenes, constituye una crisis recurrente. Pero, además, los grandes vacíos que hay en la forma como se recolectan los datos no solo nos impide conocer el verdadero alcance de esta crisis, sino que merma nuestra capacidad para enfrentarla efectivamente”, sostuvo Josh Sugarmann, director ejecutivo de VPC.
Añadió que “las personas que trabajan para reducir la violencia en sus comunidades, desde dirigentes comunitarios hasta formuladores de políticas, necesitan de la mejor información disponible, no sólo para entender mejor los problemas que están enfrentando nuestro apoyo, sino también para establecer qué enfoques preventivos son más efectivos”.INS
lp