P. Rico-Expertos en salud condenan paseo de campaña electoral de Trump en su vehículo blindado para saludar a seguidores

Por Rafael Santiago Medina 

San Juan. 5 oct (INS).- Se puso en riesgo inminente la salud de la escolta del servicio secreto que acompañó en el paseo del presidente Donald Trump en su vehículo blindado por el área aledaña al Centro Médico Militar de la base Walter Reed con el propósito de saludar a seguidores del mandatario estadounidense que se reúnen para respaldarlo. 

El subsecretario de la Casa Blanca, Jud Deere, niega esas acusaciones al indicar que se tomaron todas las medidas adecuadas para proteger al mandatario y a sus acompañantes. 

Se alega que las dos personas que acompañaban al presidente Trump, quien convalece en su cuarto día en ese centro hospitalario recuperándose de su infección por Covid-19, vestían al momento del breve paseo de saludo del mandatario a sus seguidores “rajes protectores”. .

Sin embargo, varios expertos de salud se expresaron en contra de la acción, explicando que el mandatario puso en un riesgo innecesario a los agentes de su servicio de seguridad que se vieron obligados a encontrarse con el infectado por coronavirus en un coche cerrado.

“Cada persona en el vehículo durante ese ‘paseo’ presidencial completamente innecesario ahora tiene que estar en cuarentena durante 14 días. Pueden enfermarse. Pueden morir. Por un teatro político. Mandados por Trump a poner sus vidas en riesgo por un teatro”.

“Es una locura”, escribió en Twitter James Phillips, jefe de Medicina Operacional y de Desastres en la Universidad George Washington y también médico en Walter Reed, agregando que “se trata no solo de un auto antibalas, sino de uno “herméticamente sellado contra un ataque químico”, lo que hace que el riesgo de transmisión de covid-19 dentro sea “tan alto como fuera de los procedimientos médicos”

“La irresponsabilidad de Trump es al parecer interminable”, tuiteó  Zeke Emanuel, vicerrector de iniciativas mundiales en el Departamento de Ética Médica y Política de Salud en la Universidad de Pensilvania, y añadió que la acción puso a los agentes de seguridad “innecesariamente” en riesgo de contagio. “¿Y para qué? Un truco publicitario. Es vergonzoso”, afirmó.

A su vez, la profesora Leana Wen declaró que “si Donald Trump fuera su paciente, en condición inestable y enfermedad contagiosa, y de repente abandonara el hospital para dar un paseo en un coche poniéndose en riesgo a sí mismo y a otros, llamaría a la seguridad para contenerlo y entonces realizaría una evaluación psiquiátrica para examinar su capacidad para adoptar decisiones”.  INS

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