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El estudio concluye que el 10% de la población mundial ha podido estar expuesta al virus./Inter News Service
Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 6 may (INS).- Científicos han podido detectar que hubo contagios con SARS-CoV-2 entre personas ya desde finales del año pasado y su propagación fue bien acelerada desde las primeras infecciones.
Eso es lo que indica un estudio publicado por la revista Infection, Domestics and Evolution en un edición de este mes de mayo.
Los investigadores del estudio tomaron más de 7.600 conjuntos de genomas públicos de todo el mundo, analizaron la aparición de la diversidad genómica a lo largo del tiempo y obtuvieron unos resultados consideradas “en línea con las estimaciones anteriores”.
“Esto descarta cualquier escenario que suponga que el SARS-CoV-2 pudo haber estado en circulación mucho antes de ser identificado y, por lo tanto, ya ha infectado a grandes segmentos de población”, una conclusión que no permitiría suponer que algunos grupos de personas ya podrían haber desarrollado alguna inmunidad.
El estudio concluye que el 10% de la población mundial ha podido estar expuesta al virus, de acuerdo a lo que señaló a la cadena estadounidense CNN uno de los autores de la investigación, el investigador genético Francois Balloux.
Señalan estos científicos que hicieron el estudio que la transmisión del Covid-19 entre personas vino a ser confirmada el pasado 14 de enero, “cuando el SARS-CoV-2 ya se había extendido a muchos países del mundo”.
Los expertos también identificaron 198 mutaciones recurrentes filtradas en el genoma de ese patógeno y subrayan que “esta diversidad genética de las poblaciones del SARS-CoV-2 que circulan en diferentes países apunta a que cada una de estas epidemias locales ha sido sembrada por un gran número de introducciones independientes del virus”, aunque la principal excepción a ese patrón es China, “donde solo está presente una fracción de la diversidad global”.
Por este motivo, estiman que las evidencias respaldan las sospechas de que el coronavirus infectó a personas en Europa, Estados Unidos y otros lugares, semanas o incluso meses antes de que se informaran sobre los primeros casos oficiales, en enero y febrero.
“Todas las ideas sobre tratar de encontrar un paciente cero no tienen sentido, porque hay muchos pacientes cero”, detalló Balloux, quien explicó que el hecho de que el covid-19 se propaga rápidamente no significa que se transmita más fácilmente o que sea más probable que cause una enfermedad grave: “El virus está cambiando, pero esto en sí mismo no significa que esté empeorando”. INS
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