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Juan Dávila Rivera./Inter News Service
San Juan, 29 oct (INS).- El designado presidente de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Juan Dávila Rivera, sentenció hoy que de ser confirmado al puesto por el Senado no será el subordinado de la comisionada electoral del partido de mayoría porque rendirá cuentas al interés público.
Asimismo, informó que no ha pertenecido ni es parte de “chats” político electorales a través de la aplicación de WhatsApp ni es donante de ningún partido político.
Así lo indicó hoy ante el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, en una audiencia pública en la que se evaluó su nombramiento para presidir la CEE y como juez superior del Tribunal de Primera Instancia.
Mientras, el comisionado electoral del Partido Popular Democrático (PPD), Miguel Ríos, opinó que “no se puede permitir que el presidente de la CEE sea ahijado de la comisionada (electoral del Partido Nuevo Progresista, Norma Burgos).
En tanto, la comisionada electoral del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago, opinó que si el nominado ejerce el cargo de presidente de la CEE sin involucrar su ideología partidista “está supeditado a la identidad y el carácter de las personas envueltas”.
Los comisionados electorales del PIP y del PPD se expresaron en contra del proceso que se siguió para nominar a Dávila Rivera a la CEE, ya que en ningún momento se les tomó en consideración. Todos se enteraron de la nominación por la prensa.
La comisionada electoral del PIP declaró que “no puede dar fe” de que la nominación de Dávila Rivera sea “buena” para la CEE.
“No nos consta cuál es la posición definitiva del licenciado Dávila Rivera en asuntos fundamentales sobre la estructura electoral del país y sobre asuntos que han afectado a la CEE”, dijo.
Para el comisionado electoral del PPD, con esta nominación “no se ha seguido el trámite ordinario de la acostumbrada evaluación de los comisionados electorales” lo que constituye “un elemento peligroso”.
En declaraciones a la prensa, Rivera Schatz dijo que la posición de los comisionados es entendible ante todo lo sucedido con el juez Rafael Ramos Saenz.
Sobre ese caso, el designado presidente de la CEE afirmó que “no estoy ni he estado ni estaré en ningún chat político, pero hace 11 años fui funcionario de colegio en el precinto 4 de San Juan”.
De paso explicó que no le solicitó a la Rama Ejecutiva que le nombrara al cargo de juez superior del Tribunal de Primera Instancia como condición para aceptar la posición de presidente de la CEE.
Dávila Rivera fue nominado por el gobernador Ricardo Rosselló Nevares para presidir la CEE el 4 de septiembre pasado luego de que los comisionados electorales no pudieran llegar a un acuerdo para ocupar dicha posición.
A esos efectos, y según la Ley Electoral, el primer ejecutivo hace la nominación la cual debe ser considerada por la Asamblea Legislativa.
La CEE es presidida de forma interina por Nicolás Gautier luego de que el exjuez Ramos Sáenz renunciara al cargo en febrero de este año.
La semana pasada la Cámara de Representantes votó a favor del nombramiento de Dávila Rivera como presidente de la CEE.
En el caso del Senado, también tiene ante su consideración el nombramiento de Dávila Rivera como juez superior del Tribunal de Primera Instancia.
Dávila Rivera posee un juris doctor de la Universidad de Puerto Rico (UPR) y un máster en derecho español de la Universidad de Salamanca en España.
El nominado fue oficial jurídico de varios jueces en el máximo foro judicial local y trabajó para el bufete de abogados Rivera Munich & Hernández Law Offices.
Actualmente, es conferenciante de la Escuela de Derecho de la Universidad Interamericana y secretario del Tribunal Supremo.
El presidente del Senado explicó que Burgos Andújar no fue citada a la audiencia pública, ya que “es un nombramiento del gobernador y presidente del PNP”, por lo que entiende que estaría a favor del designado.INS
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