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Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 8 mar (INS).- La determinación del juez Edson Fachin, del Supremo Tribunal Federal (STF), anulando todas las condenas contra el expresidente de Brasil Luiz Inacio Lula da Silva, relacionadas con el caso Lava Jato, se dio como una medida cautelar en respuesta a un habeas corpus presentado por la defensa de quien fuera mandatario del país sudamericano entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de diciembre de 2010.
Empero, además, Fachin con su fallo declaró “la pérdida del objeto de 10 hábeas corpus y cuatro denuncias interpuestas por la defensa del expresidente”, incluida la demanda en la que cuestiona el accionar del exjuez Moro, precisa una nota del STF.
Moro condenó en julio de 2017 a Lula da Silva a nueve años y seis meses de prisión, acusado de corrupción y blanqueo de dinero, en el caso del departamento triplex, en el marco de la Operación ‘Lava Jato’, convirtiéndose, de esta manera, en el primer expresidente condenado por corrupción pasiva en la historia de Brasil.
El exmandatario pasó un año y siete meses en prisión, desde abril de 2018 hasta noviembre de 2019, cuando fue puesto en libertad.
Posteriormente, el exjuez aceptó ser ministro de Justicia del presidente Jair Bolsonaro, cargo en el que estuvo desde enero de 2019 a abril de 2020.
El Partido de los Trabajadores (PT), cuyo máximo líder es Lula da Silva, celebró en Twitter con la etiqueta #LULAINOCENTE.
Por su parte, Gleisi Hoffmann, presidenta del PT y diputada federal por Paraná, señaló que están a la espera “del análisis legal” de la decisión de Fachin.
Indicó que el reconocimiento por parte del juez del STF de que Moro “nunca pudo haber juzgado a Lula” llegó con “cinco años de retraso”.
Entretanto, Arthur Lira, presidente de la Cámara de Diputados, aliado de Bolsonaro, manifestó su duda sobre la decisión de Fachin.
“Mi mayor duda es si la decisión individual fue para absolver a Lula o a Moro. Lula puede hasta merecerla. Moro, jamás”, escribió en Twitter.
“Se hizo justicia”, dijo desde Argentina, el presidente Alberto Fernández, al celebrar la determinación.
“Se anularon las condenas en su contra que fueron dictadas con el solo fin de perseguirlo y eliminarlo de la carrera política”, enfatizó.
Por su parte, el analista político Breno Altman apuntó que la anulación de las condenas contra Lula da Silva supone que podría presentarse a las elecciones presidenciales del 2022 contra Jair Bolsonaro.
“Ha sido una gran victoria del presidente Lula y su defensa, porque en este momento, por primera vez en años, es un ciudadano totalmente libre en el goce de sus derechos electorales”, subrayó. INS
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