Inter News Service Agencia de Noticias
Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 4 ago (INS).- En momentos de fuerte abstención electoral, el fanatismo partidista domina las urnas, y eso es lo que algunos observadores políticos temen pueda suceder en las próximas elecciones en Puerto Rico.
Se observa una predominante tendencia al abstencionismo electoral entre muchos potenciales electores en las próximas elecciones de noviembre por un creciente descontento ciudadano con la política tradicional del país dominada por el bipartidismo de la partidocracia institucionalizada.
El peligro que expertos advierten es que, a mayor abstención electoral, el dominio en las urnas del fanatismo político partidario característico de la partidocracia crece en posibilidades y no se deje sentir la voluntad del pueblo en los comicios de noviembre y termine silenciándose la voz ciudadana por la vía tradicional del voto.
Quedándose el pueblo sin expresión de su voluntad en las urnas, la otra opción lógica es la protesta en las calles y la ingobernabilidad. Empero, sin una canalización adecuada de la protesta callejera que coagule en una revolución articulada hacia un cambio definido, lo que queda es el caos y la anarquía.
Analistas políticos sugieren que existe la posibilidad de utilizar las urnas en una gesta revolucionaria, pero se necesitan opciones electorales organizadas, no necesariamente tradicionales, que la alternativa del voto mediante el write-in en la papeleta, si la burocracia del sistema electoral se convierte en un obstáculo.
La revolución del write-in en la papeleta electoral tiene posibilidades de espontaneidad genuina, pero tiene que ser una espontaneidad articulada colectivamente, observan los analistas políticos. De lo que se trata es de invertir el proceso en un momento histórico de crisis política, institucional y de gobernabilidad genuina del país.
Con una gobernación, una legislatura y unos ayuntamientos municipales revolucionados por el voto de expresión directa del electorado en la columna del write-in en la papeleta electoral, se rompe con la institucionalidad del sistema electoral burocratizado y dominado por la partidocracia.
Para este nobel proceso revolucionario en las urnas electorales, se requiere la espontaneidad articulada de nominaciones de candidaturas, utilizando las plataformas sociales digitales de la Internet, y el protagonismo de las organizaciones comunales y ciudadanas, que pasen de la protesta a la propuesta.
La posibilidad con esto es primero la toma del poder por voluntad genuina del pueblo y luego en la marcha la organización desde las entrañas mismas de la sociedad de una colectividad política que brinde apoyo institucional a la gesta revolucionaria para la transformación profunda y genuinamente democrática de la sociedad.
Una gobernanza para el pueblo es la fuerza motriz inicial de esta movimiento ciudadano, que luego irá articulándose ideológicamente con el tiempo.
Estas parecen ser cavilaciones de un experimento que todavía no madura políticamente en Puerto Rico, pero que están ahí para la reflexión, INS
rsm/lp