R. Dominicana-Autoridades del Ministerio de Salud en alerta ante la posibilidad de un brote de rabia

Santo Domingo, 14 ago (INS).- El Ministerio de Salud investiga la posibilidad de un brote de rabia humana luego de la muerte de una señora a causa de la mordida de una mangosta o hurón mientras estaba sentada en su vivienda de la comunidad Miches, región oriental del país.

Susana Gil Santana, de 78 años, falleció el pasado viernes en el hospital Antonio Musa, de San Pedro de Macorís, días después de ocurrir el hecho de acuerdo con las informaciones preliminares.

Técnicos en manejo de rabia y de control de enfermedades del organismo se trasladaron a ese lugar para tomar muestras a los fines de determinar si se trata de esa enfermedad mortal.

El doctor José Manuel Puello, director del Centro Nacional de Control de Enfermedades Tropicales (CENCET), dijo que se está evaluando el caso y adoptando las medidas recomendadas para prevenir la propagación del virus.

Recordó que la paciente presentaba antecedente de mordida de mangosta y fue al servicio de salud de la zona en busca de asistencia, “donde le atendieron, le aplicaron toxoide tetánico, pero no la vacunaron contra la rabia”.

Esa versión concuerda con la ofrecida por familiares de la dama que denunciaron que hubo negligencia médica al no dársele seguimiento, al que afirman “ni siquiera fue vacunada”.

Explican que “no se le aplicó la inyección para prevenir la rabia a pesar de que ella había comunicado que fue un hurón que la mordió en su pierna izquierda, mientras estaba sentada en el patio de su casa”.

Se recuerda que en el 2018 el país registró la muerte por rabia humana de una mujer de 51 años, residente en Santiago (norte), también mordida por una mangosta, así como tres niños en Pedernales (suroeste) por mordedura de perro.

Según los reportes periodísticos, en la última década, el comportamiento de la letal enfermedad, que ataca las células nerviosas del cerebro y que se transmite por la mordedura de perros, gatos y hurones infectados con el virus, se mantenía prácticamente controlado, con un promedio de un caso por año, con excepción del 2009 cuando se reportaron cuatro muertes y el 2010, con tres defunciones.

Al revisar los capítulos de prevención y control de zoonosis o enfermedades transmitidas por animales, que se realizaba en colaboración con el clausurado Centro Antirrábico Nacional, en los boletines epidemiológicos publicados por el Ministerio de Salud Pública se aprecia que en ambos años se reportaron cientos de casos de rabia animal y miles de agresiones a personas. INS

mv/lp