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Santo Domingo, 25 jun (INS).- El Congreso Nacional amaneció este martes fuertemente resguardado por decenas de policías y militares ante el anuncio de legisladores partidarios del expresidente Leonel Fernández y otros sectores de protestar en ese lugar contra una eventual reforma constitucional que busca habilitar la reelección del presidente Danilo Medina.
La presencia de los uniformados supera en número a los que prestaban servicio ayer, lunes, cuando se produjo un incidente en el que evitaron que legisladores leonelistas montaran una carpa en el frente de la sede de ese Poder Legislativo.
La militarización de la sede legislativa fue solicitada por el presidente de la Cámara de Diputados, Radhamés Camacho, por “las constantes manifestaciones que se producen en la parte frontal de la edificación”.
Ayer se produjeron agresiones y confrontaciones cuando seguidores de Fernández intentaron levantar una jornada de lucha permanente contra las intenciones reeleccionistas.
Intentaron colocar una carpa que fue impedida por los agentes policiales bajo el argumento de que los organizadores de la actividad no contaban con el permiso correspondiente.
Sin embargo, los gestores del movimiento mostraron una autorización avalada por el Ayuntamiento del Distrito Nacional para la jornada cívica la cual fue desestimada por dos generales que estaban al frente de las tropas policiales.
Los agentes antimotines atacaron este lunes a los manifestantes lanzando bombas lacrimógenas cuyos gases afectaron al diputado Henry Merán, quien desde anoche está ingresado en una sala de cuidados intensivos en la Clínica Independencia, de la capital.
La condición del legislador es “estable”, de acuerdo a datos suministrado por Rafael Núñez, encargado de comunicación de la campaña del expresidente Leonel Fernández.
Explicó que la salud del congresista fue afectada por los gases debido a su condición de asmático. INS
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