P. Rico-Peligra el abasto de agua para cuatro municipios del país

San Juan, 3 jun (INS).- Miembros de una organización sin fines de lucro del Valle de Lajas manifestaron que existe una situación alarmante relacionada a los abastos de agua en el suroeste que puede afectar a decenas de miles de personas y a decenas de agricultores. De acuerdo con el portavoz del Frente Unido del Valle de Lajas, Alfredo Vivoni Remus, “al presente hay alrededor de 70,000 personas en los municipios de Sabana Grande, Lajas, San Germán y Cabo Rojo, que dependen para su agua potable del sistema de riego que administra la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE)”.

“En este caso la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) le compra un promedio de 8.3 millones de galones diarios a la AEE para las plantas de filtros urbana de Lajas, Maginas de Sabana Grande y Betances de Cabo Rojo”, indicó.

Miembros de la organización, galardonada con el Premio a la Solidaridad del “Miranda Foundation” en 2017, plantearon que los embalses que forman parte del sistema de riego deben estar significativamente sedimentados y que esto representa una disminución crítica de su capacidad para almacenar agua.

“Los datos que nos han suplido establecen que la última evaluación que se hizo de la capacidad de estos embalses fue hace 20 años, de 1997 a 2000, y la misma arrojó que se había perdido 33% de su capacidad. Nosotros estimamos que los niveles de sedimentación actuales son críticamente altos ya sea por la construcción u otras actividades que provocan que los niveles de erosión aumenten”, comentó Luis Ortiz, miembro de la junta directiva del Frente, organización que publica el blog www.granambiente.com.

Además de suplir agua a los municipios, hay decenas de agricultores cuyas actividades agrícolas en el Valle de Lajas dependen también del agua de riego de dicho sistema.

Según directivos de la organización, estos agricultores consumen aproximadamente cuatro mil millones de galones de agua al año provistos por la AEE a través del distrito de riego del Valle de Lajas.

“La pregunta clave que al parecer nadie puede responder con certeza es ¿cuál es la vida útil que le queda al sistema de riego y qué se debe hacer para enfrentar la situación?” expresó el agrónomo Ariel Ramírez, también miembro de la junta directiva de la organización sin fines de lucro.

Agregó que “hay al menos dos opciones en el caso de que la capacidad del sistema se haya agravado: o el dragado de los embales que puedan estar en situación crítica o el establecimiento de nuevos embalses que nutran el sistema. Nuestra organización desea servir de agente aglutinador para unir a las partes responsables del sistema y a los que se sirven del mismo”.INS
lp