P. Rico-Celebran Simposio en conmemoración de los cien años de natalicio de monseñor Antulio Parrilla

Ponce, 2 may (INS).- El monseñor Antulio Parrilla consagró su vida a las luchas por la defensa de las causas justas, la promoción de la paz y del cooperativismo, como herramienta para el desarrollo solidario y la equidad social.

Hoy, las luchas de este sacerdote siguen vigentes y son más pertinentes que nunca, destacó Israel Santiago Lugo, director del Instituto de la Doctrina Social de la Iglesia de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico.

Es por eso que, al cumplirse el centenario de su nacimiento, estará celebrándose con un encuentro.

“La relevancia de su mensaje debe ser llevada a otras generaciones y, al cumplirse los cien años de su natalicio, el Instituto de la Doctrina Social de la Iglesia de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico celebra un Simposio con estudiosos y especialistas de la vida de esta importante figura. El evento será abierto al público y se llevará a cabo el 7 de mayo, desde las 9:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde en el teatro Monseñor Vicente Murga, del recinto de la PUCPR en Ponce”, destacó Santiago Lugo.

Agregó que “la gesta del monseñor Parrilla tiene mucha pertinencia en la situación política, social y económica que estamos viviendo. Es nuestra responsabilidad perpetuar su legado de lucha por las causas de los pobres, de la paz y de la justicia. En este Simposio iniciaremos el trabajo para perpetuar su legado, porque su figura debe ser estudiada por las nuevas generaciones ya que su visión, sus creencias y su mensaje continúan siendo relevantes en el Puerto Rico de hoy”.

Entre los panelistas del Simposio se encuentran el reverendo Jorge Ambert, sacerdote que conoció personalmente a Parrilla y disfrutó de su amistad; Miguel Santiago Santana, estudioso de la vida del religioso y autor de un libro sobre su figura; y Luis Rivera Pagán, doctor en Teología y amigo de Parrilla.

Parrilla nació en San Lorenzo en 1919 y fue ordenado sacerdote diocesano en 1952.

Fue un hombre de visión, estudio y oración, que luchó incansablemente por la equidad y la justicia, en especial de las clases pobres y desventajadas.

Además, fue director de la Acción Social Católica, y un gran propulsor del movimiento cooperativista.

En 1957 ingresó como jesuita en la Compañía de Jesús.

Después, en 1965, fue consagrado obispo titular de Ucres y auxiliar de Caguas.

Más adelante dirigió el Seminario Regina Cleri de Ponce y fue profesor en el Instituto de Cooperativismo de la Universidad de Puerto Rico.

Fundó el Centro Social Juan XXIII para la formación del laicado. Escritor asiduo en diarios locales y extranjeros, defendió muchas causas en su afán por ver redimido al pueblo puertorriqueño.INS
lp