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Santo Domingo, 16 mar (INS).-El sociólogo César Cuello aseguró que la situación que encara la dominicana Ana Julia Quezada por el asesinato del niño español Gabriel Cruz, podría desencadenar cierto rechazo hacia los quisqueyanos residentes en España, debido a lo mediático del caso y la sensibilidad que provocó su desaparición y posterior hallazgo de su cadáver.
El caso del menor, hijo de su pareja sentimental, ha consternado a la comunidad de Almería, donde sucedió el trágico hecho y a la sociedad española en general.
Se trata, sin embargo, de fenómeno normal en este tipo de hechos, que eventualmente pasará, según explicó Cuello a un medio nacional.
“Siempre que sucede un caso tan atroz y tan doloroso como este en el que está involucrado un extranjero es normal que los nacionales tengan una actitud de rechazo y de odio, sobre todo en las personas que no entienden que un hecho tan criminal como este se puede dar en cualquier persona”, explicó.
Y continuó: “Hay españoles que han asesinado a dominicanos allá, en fin que eso se da, pero las personas reaccionan de inmediato, acusando por la condición de extranjero. Los grupos más vulnerables tienden a ser los ‘chivos expiatorios’ y los problemas se vuelcan hacia ellos”.
La criolla Ana Julia Quezada, de 44 años, confesó el martes 13 de marzo a las fuerzas de seguridad españolas que fue ella quien mató al niño de ocho años Gabriel Cruz, que había desaparecido el 27 de febrero en una localidad del sureste de España.
La autopsia realizada al cadáver del niño desveló que murió estrangulado el mismo día de la desaparición, según fuentes de la investigación.
El cuerpo fue encontrado el domingo por la Guardia Civil en el maletero de un automóvil que conducía la mujer. Habría ayudado a buscar al niño y le daba fuerzas al padre.
Varios dominicanos residentes en España consultados por el periódico dominicano Diario Libre externaron preocupación por las posibles consecuencias, sobre todo porque en los medios se ha destacado la nacionalidad de la confesa asesina.
Algunos comentaron que la hija menor de edad de Quezada está sufriendo ataques de todo tipo y por las redes sociales, aunque muchos españoles consideran que no debe haber ningún tipo de ataque contra ella pr el crimen cometido por su madre.
Refiriéndose a esa situación, Cuello expresa que la agresión a la niña es injustificada y no debe permitirse bajo ningún concepto. “Eso es indignante e inaceptable. Las autoridades deben actuar protegiendo a esa menor, porque ella no debe ser víctima de retaliación. En ninguna parte del mundo un menor que no haya participado en un crimen, puede ser responsabilizado. La comunidad tiene también que proteger a esa menor, porque en una situación de odio cualquier cosa puede pasar”, explicó.
Según el sociólogo el debate no debe ser enfocado en el tema de la nacionalidad al considerar que “esos son debates inevitables, porque cualquier individuo puede cometer ese tipo de actos, no podemos enfocarnos en que son de tal o cual país, sino la dimensión del hecho en sí”.
Para este profesional, los dominicanos residentes en España deben tener un perfil bajo y no fomentar la contraparte y el odio, pero señala que no tienen por qué humillarse, y que entiendan que este es un proceso que se va.
“He escuchado pronunciamiento de que la comunidad dominicana residente en España debe pedir perdón, pero yo me preguntó por qué, no creo que haya que hacerlo, simplemente que la justicia actúe. La sociedad dominicana lo que tiene es que rechazar este tipo de actos vengan de donde vengan. Reitero lo mejor que pueden hacer los dominicanos residentes en España es rechazar este acto tan perverso. Es un acto individual y no se debe asumir un castigo colectivo”, indicó Cuello.
Entre los posibles escenarios a los que tendrían que enfrentarse los quisqueyanos residentes en el país europeo, el especialista señala que podrían incrementarse el odio hacia ellos “si no se saben manejar, pero si no suceden casos parecidos, esto paulatinamente se va a olvidar”. INS
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