P. Rico-Frente común para la conservación y protección de la Reserva Natural de Isla de Mona denuncia falta de transparencia en propuestas

San Juan, 24 jul (INS).-Un frente común de entidades comprometidas con la conservación y protección de la Reserva Natural de Isla de Mona y Monito se ha organizado en respuesta a la Resolución Cameral 230 de la representante Maricarmen Más Rodríguez, que pretende realizar una investigación sobre la viabilidad de establecer programas de desarrollo ecoturístico y de investigación en ciencias naturales y marinas en el lugar.

Investigadores, operadores turísticos, acampadores y organizaciones sin fines de lucro y no gubernamentales componen el frente liderado por la organización Amigos de Amona.

El profesor Rafael Joglar, del Proyecto Coquí y quien en la pasada semana se encontraba en la Isla de Mona,  señaló que en el lugar se realizan “investigaciones científicas y actividades ecoturísticas desde hace mucho tiempo”.

“Esta resolución está tratando de reinventar la rueda y no está proponiendo nada nuevo. Nos cuestionamos la falta de transparencia y las incongruencias en los comentarios que han surgido de parte de funcionarios del gobierno. Rechazamos toda posibilidad de crear una pista de aterrizaje o un súper muelle y recomendamos continuar desarrollando un ecoturismo comunitario”, explicó Joglar.

Waldemar Alcobas, de Amigos de Amona, expresó en tanto que “las acciones recientes de funcionarios entorno a la Resolución Cameral 230 da la impresión que favorecen unos sectores económicos y académicos particulares sin integrar los grupos de interés que vienen trabajando en la reserva por muchos años”.

Alcobas agregó que “parecen utilizar el concepto de ecoturismo para favorecer unas actividades turísticas que nada tiene que ver con la conservación y el manejo sostenible de la Isla de Mona. El proceso de investigación pierde legitimidad cuando tienes personas buscando favorecer económicamente a sus clientes privados”.

Entre los integrantes del frente se encuentran grupos comprometidos con la protección de los recursos naturales en la isla, como Defensores del Ambiente y la Cacería en la Isla de Mona (DACIM), Proyecto Coquí, Sierra Club y entidades como Acampa y Ruta Nativa, que organizan viajes recreativos y educativos a la Isla de Mona desde hace varios años.

Estos grupos de acampadores llevan a cabo experiencias de inmersión de la naturaleza de la isla durante caminatas interpretativas y prácticas de impacto mínimo, como parte de una experiencia turística y de aventura.

“Nuestros viajes a Mona son liderados por voluntarios dedicados a la protección y conservación de la Reserva de Isla de Mona. Nuestra prioridad es la seguridad y la educación. Previo a un viaje a Mona a nuestros participantes se les requiere asistir a dos reuniones de orientación”,  destacó Adriana González, coordinadora de Sierra Club.

González indicó, además, que “nosotros somos las entidades que utilizan y protegen el recurso y no fuimos incluidos en ninguna parte del proceso”.

Carlos Ramos Acevedo, presidente de DACIM, sostuvo por su parte que “los cazadores hemos aportado con la creación de infraestructura en las áreas de acampar, incluyendo recientemente mejoramientos a cisternas de agua y construcciones de gazebos”.

Acevedo informó que “en el pasado hemos propuesto aportar con el mejoramiento del muelle en Playa Pájaros proveyendo la mano de obra de forma voluntaria y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales no ha buscado mover el asunto. En DACIM entrenamos a nuestros líderes y realizamos visitas de limpieza entendemos que Mona es un recurso que se tiene que proteger”.

El presidente de DACIM enfatizó que “estamos dispuestos a continuar aportando y trabajar para mejorar las áreas, pero hemos recibido resistencia de la misma administración que ahora propone estos programas”.

La profesora de Ciencias Ambientales de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, Elvia Meléndez-Ackerman, mencionó que “la designación de Reserva Natural de la Isla de Mona ya viene con unas limitaciones en el uso y manejo de este recurso”.

“Más allá del aislamiento geográfico, esta designación ha permitido en parte la conservación de la biodiversidad local. No sería la primera ni la última reserva que se utilice para fines de desarrollo de turismo sustentable”, expuso Meléndez-Ackerman.

El Dr. Edwin A. Hernández Delgado, investigador afiliado del Departamento de Ciencias Ambientales y del Centro para la Ecología Tropical Aplicada y Conservación de la UPR, y quien ha realizado estudios de ecología en los arrecifes de coral de Isla de Mona durante la pasada década, aseguró que la
“Resolución Cameral 230 es un documento altamente preocupante desde la perspectiva de la conservación de los recursos marinos de la Isla de Mona”.

Hernández Delgado comentó que “de no regularse adecuadamente, el fomentar un incremento en el número de visitantes puede redundar en un aumento en el número de visitas de embarcaciones de placer privadas”.

Puntualizó que “Isla de Mona no tiene facilidades portuarias, ni boyas de amarre suficientes para sostener este tipo de operaciones. Además, las entradas naturales a sus únicos dos atracaderos de desembarque son entradas muy angostas y peligrosas entre arrecifes de coral. Esto puede resultar en un incremento en los riesgos de impactos por encallamientos y por anclaje en los arrecifes”.

Los grupos de este frente rechazan las intenciones de la Legislatura y proponen mejorar las condiciones para llevar a cabo experiencias de turismo de bajo impacto, como los ya existentes, apoyando los grupos sin fines de lucro, garantizando el acceso a los operadores locales, resaltando el apoyo de los cazadores y estableciendo un plan de prioridades para las investigaciones que sean de provecho para la conservación y restauración de la isla.

José Menéndez, presidente del Capítulo de Sierra Club en Puerto Rico, manifestó que “si no hemos desarrollado el ecoturismo sustentable en otros lugares de Puerto Rico no podemos apuntar a la Isla de Mona como comienzo”.

“La isla es un recurso incalculable que tiene que ser manejado propiamente. Buscamos que se mejoren las ofertas turísticas en los puntos de partida a la isla de Mona, como los son Cabo Rojo y Mayagüez”, insistió.

Menéndez  precisó que “tenemos que apoyar a esas comunidades en el mejoramiento y desarrollo de empresas como hospederías comunitarias, proveedores de transporte marino y proveedores de buceo y viajes recreativos”. INS

ow