P. Rico-Sin fin las disputas del presidente Donald Trump en diferentes frentes políticos; ahora sale a relucir diferendo con Ángela Merkel y Alemania

Por Rafael Santiago Medina

San Juan, 30 may (INS).- Las disputas del presidente Donald Trump no tienen fin. La canciller alemana, Ángela Merkel, no aceptó la invitación de Trump de participar en la cumbre del G7 a finales de junio próximo, debido a lo que se considera “es el último de una larga lista de ejemplos de la complicada relación entre los dos líderes”.

Alemania ha sido uno de los más importantes aliados de Estados Unidos desde el término de la Segunda Guerra Mundial.

Se estima por analistas geopolíticos que la negativa de Merkel a asistir a la cumbre en persona echa por tierra los intentos de Trump de presentar la reunión como un momento histórico en medio de los cierres y las prohibiciones de viaje impuestos para luchar contra la pandemia del SARS-CoV-2.

Se rumora en círculos diplomáticos que en una reciente llamada, los dos líderes tuvieron “acalorados desacuerdos” sobre la OTAN, Nord Stream 2 y las relaciones con China.

La agencia rusa de noticias Sputnik cita al director del Centro de Peritaje Geopolítico de Rusia, Valen Korovin, diciendo que “las disputas entre Estados Unidos y Alemania se basan en la cuestión de la soberanía alemana y europea”, porque Alemania ha estado subordinada a Washington durante décadas, lo que antes se justificaba por una amenaza de la Unión Soviética, pero ahora Rusia no representa ninguna amenaza”.

Kerovin afirma en la entrevista con Sputnik que “Merkel es una política globalista y partidaria de la fuerza blanda, pero Trump actúa de manera conflictiva. (…) Si Trump agudiza las situaciones, Merkel también plantea la cuestión de la presencia estadounidense en Europa, sobre el arsenal nuclear de EEUU en Alemania y, en general, sobre las maneras de solucionar los problemas. ¿Qué clase de dictadura económica es? ¿Por qué surge el gas de esquisto sin alternativa, cuando es más rentable para Alemania comprar el barato gas ruso?”.

En 2018, Merkel se negó a cumplir las condiciones establecidas por el presidente estadounidense sobre el gasoducto Nord Stream 2 y continuó apoyando el proyecto. El oleoducto, construido para aumentar el flujo de gas ruso en la mayor economía de Europa, se vio frustrado hace cinco meses después de que el presidente Trump impusiera sanciones que obligaron a los trabajadores a retirarse.

Trump criticó en varias ocasiones a Alemania, y a Merkel específicamente, por su bajo presupuesto para gasto de defensa y su falta de compromiso con la OTAN, entre otras cosas. A su vez, Merkel ha manifestado su desacuerdo con el enfoque unilateral de la administración Trump sobre una serie de cuestiones de política exterior, desde el cambio climático hasta el acuerdo nuclear con Irán. Además, Alemania se pronunció en contra de la retirada de EEUU del Tratado de Cielos Abiertos.

El diferendo con Alemania revela los diversos frentes de disputa que mantiene el presidente Trump en diversas áreas nacionales e internacionales. INS

rsm/aa