P. Rico-Coronavirus/Choca el altruismo sanitario con el deseo de rentabilidad en la carrera mundial por desarrollar una vacuna

Por Rafael Santiago Medina

San Juan, 3 may (INS).- La carrera desesperada en el mundo por desarrollar una vacuna contra el SARS-CoV-2 está inmersa en la guerra comercial por controlar el secreto de su fórmula biomédica y tener la patente de exclusividad.

El fiscal general adjunto de seguridad nacional del gobierno de Estados Unidos, John C. Demers, ha advertido que las innovaciones estadounidenses deben protegerse del robo, principalmente de Beijing.

“La investigación biomédica ha sido durante mucho tiempo un foco de robo, especialmente por parte del gobierno chino, y las vacunas y los tratamientos para el coronavirus son el santo grial de hoy”, sentencia Demers.

El funcionario agregó que “dejando a un lado el valor comercial, sería muy importante que Estados Unidos sea el primero en desarrollar un tratamiento o vacuna; utilizaremos todas las herramientas que tenemos para salvaguardar la investigación estadounidense”.

La intensidad del esfuerzo de investigación global es tal que los gobiernos y las empresas están construyendo líneas de producción aun antes de que tengan algo en concreto que producir.

Según el doctor Anthony S. Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, no hay que esperar a obtener una respuesta antes de comenzar a fabricar.

“Vamos a comenzar a aumentar la producción con las empresas involucradas”, anticipa Fauci.

Dos de los principales farmacéuticas en Estados Unidos, Johnson & Johnson y Moderna, han anunciado asociaciones con empresas manufactureras.

Johnson & Johnson promete mil millones de dosis de una vacuna aún no desarrollada para fines del próximo año.

El gigante farmacéutico AstraZeneca, con sede en Gran Bretaña, es más optimista al decir que trabaja con un proyecto de desarrollo de vacunas en la Universidad de Oxford para fabricar decenas de millones de dosis para fines de este año.

Ya hay ensayos con humanos para acelerar el proceso: pruebas en las que a los voluntarios se les inyecta una vacuna potencial y luego se exponen deliberadamente al Covid-19.

Existen grandes desafíos para ampliar la producción y distribución.

El fundador de Microsoft, Bill Gates, cuya fundación está gastando 250 millones de dólares en ayudar a estimular el desarrollo de vacunas, advirtió sobre la escasez crítica de un componente vital: el vidrio médico.

Sin suficientes suministros de vidrio, se dificulta transportar los miles de millones de dosis que finalmente se necesitarán para hacer frente al Covid-19.

El afán de lucro de la industria farmacéutica, que generalmente lucha duro para sacar el máximo provecho de sus inversiones en nuevos medicamentos, pudiera ser óbice a la urgente necesidad de una acción rápida para vacunar eficazmente a la mayor cantidad posible de personas contra el nuevo coronavirus. INS

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