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Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 20 ene (INS).- Si bien vimos a un pueblo indignado en el verano de 2019, la gobernadora Wanda Vázquez Garced debe tener cuidado de que no surja contra su administración de gobierno un invierno de 2020 con manifestaciones multitudinarias similares.
Lo del almacén de suministros de emergencia de La Guancha, en Ponce, puede ser la copa que colme la copa de la paciencia del pueblo con la prevaricación del gobierno. Sí. La gota que colme la copa, como lo fueron los chats de la infamia del exgobernador Ricardo Rosselló Nevares y sus allegados.
Ya se sabe que dos de los siete almacenes regionales de almacenamiento de abastos de emergencia del Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Nmead) dispersos por el país, el de Guaynabo y el de Ponce, propiedad de la Compañía de Fomento y Exportaciones, pagan 27,300 dólares mensuales por ambos para almacenar ahora, tras el huracán María, víveres y artículos de emergencia en situaciones de devastación por fenómenos naturales que no se distribuyen a los necesitados, sin que pueda entenderse este despropósito.
Una nación en crisis económica con una deuda que agobia a su fisco se mantiene asumiendo pagos de alquiler por los almacenes destinados ahora para suministros de emergencia que, en el caso del ubicado en Guaynabo, representa un gasto anual de 207 mil dólares y por el cual ha pagado en los últimos tres años 622,600 dólares. Un contrato de alquiler que se extiende hasta junio de 2021.
En el caso de Ponce, el alquiler del almacén de La Guancha tiene un gasto anual de 120 mil dólares, cuya función ha sido echar a perder paletas de agua potable y malear por desuso en apilamiento otros víveres no utilizados en atender las necesidades inmediatas de miles de necesitados, anteriormente por la devastación del huracán María y ahora por los terremotos con epicentro en el suroeste de Puerto Rico.
Comienzan a verse indicios de estarse cuajando una indignación ciudadana que amenaza con expresarse en multitudinarias manifestaciones callejeras como las del verano de 2019, que ya este domingo se ha ido materializando con pequeñas protestas en Ponce y en el Viejo San Juan. Con pequeñas protestas también comenzó el verano de 2019. INS
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