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El director de la Aafaf, Omar Marrero, niega que la contratación represente un conflicto de interés. Inter News Service
Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 19 ene (INS).- El monopolio de las 17 unidades generatrices de energía en Puerto Rico pasará de ser público a privado con la privatización propuesta, un monopolio de características todavía peores que el controlado por el interés público del Estado.
Como parte del contrato de privatización de la fase generatriz energética —del que se han revelado pocos detalles— el consorcio privado al que se adjudicará el contrato será Genera PR.
Fermín Fontanés Gómez, director ejecutivo de la Autoridad para las Alianzas Público Privadas (AAPP), y Omar Marrero, director de la Autoridad de Fiscal y Asesoría Financiera (Aafaf) y director de la Junta Directiva de las Alianzas Público Privadas, niegan, además, que la contratación represente un conflicto de interés, siendo una de las empresas del consorcio privatizador proveedora de gas natural que se utiliza en el sistema de electrificación.
La aportación generatriz de 15% de AES y el otro 15% de Ecoeléctrica lo que hacen es agregar generación de electricidad a monopolio existente y no son competencias en el mercado de electrificación per sé.
Tras haberse privatizado el sistema de transmisión y distribución eléctrica, ahora se inicia la privatización de la otra fase del sistema: la generación de electricidad. Se pasa de un monopolio estatal de electrificación a un monopolio empresarial privado del sistema energético.
El proceso de privatización del sistema de electrificación de Puerto Rico está sustentado en las teorías económicas de Friedrich August von Hayek (1899-1992), de libertad absolutas a las leyes de mercado en la economía.
Hayek promulgaba la superioridad del liberalismo económico sobre la planificación económica y las economías mixtas (estatizadas y privadas) del sistema económico de John Maynard Keynes (1883-1946).
Según él, la inflación reduce el poder adquisitivo de los consumidores, pero beneficia a los empresarios que se benefician del desfase temporal entre la adquisición de los medios de producción y la entrega del producto, llegando a alargar a propósito el ciclo productivo (menos eficiencia y mala asignación de los recursos). Además, los préstamos tomados tienen un menor coste.
El incremento en las rentas de los empresarios aumenta el precio de los bienes de consumo, disminuyendo el salario real. Por este motivo disminuye la producción (menos demanda) y los bienes de capital disminuyen su valor. En ese momento hemos llegado a la parte baja del ciclo económico.
En esta parte baja, afirma Hayek, es una mala idea la intervención estatal por las conexiones en la economía que nos han llevado a esta situación. Hayek incluso afirmaba que en las partes bajas del ciclo se destruía el exceso de capital acumulado en la fase ascendente hasta que el sistema volvía al equilibrio.
En sus últimos años Hayek asesoró a distintos gobiernos en sus políticas económicas tras la vuelta del liberalismo económico en los años 70. Entre ellos asesoró a Margaret Thatcher (a quien inspiró fuertemente) y a Augusto Pinochet, aunque su influencia y su contacto no fue especialmente fuerte, limitándose más bien a entrevistas. También se deja ver su sombra en la constitución chilena de 1980.
Ronald Reagan afirmó que junto con Milton Friedman era de las personas que más le habían influido filosóficamente. También tuvo una fuerte influencia en la revolución de terciopelo y en las reformas que pusieron en práctica los países de Europa del Este en sus últimos años de comunismo.
La implantación de las ideas de Hayek en el sistema de electricidad de Puerto Rico se produce en un ambiente de carencia de libre competencia en el mercado eléctrico.La única fuerza verdadera que podría desatarse en Puerto Rico con las ideas de Hayek es el afán de lucro, lo cual incidirá en un encarecimiento en los costos de la fase generatriz que terminará encareciendo todavía más las tarifas del servicio de electrificación isleño, puesto que la generación de electricidad es la que establece el precio de las tarifas del servicio eléctrico. INS
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