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Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 18 may (INS).- La definición que ofrece la Real Academia Española (RAE) sobre nanotecnología es aquella tecnología en la que el orden de magnitud se mide en nanómetros, con la aplicación a la física, la química y la biología.
La nanomedicina, que es la nanotecnología aplicada a la medicina, se está desarrollando exponencialmente y al parecer revolucionará la historia de la salud, prometiendo identificar, tratar, eliminar e incluso prevenir enfermedades que se creían imposibles de erradicar.
La nanomedicina es la manera de entrar a escala nanométrica al cuerpo humano y destruir células cancerígenas desde su interior. Permite, además, que el cuerpo absorba mejor los medicamentos para inhibir patologías con las que el hombre ha vivido siempre.
Se pronostica que mediante la nanomedicina los fármacos serán más directos y selectivos, eliminando daños colaterales, aumentando la esperanza y la calidad de vida.
Mediante la nanotecnología se están logrando avances en la creación de fármacos o incluso en sistemas que combinan el diagnóstico y la terapia.
El augurio que hacen los científicos es que los avances en el campo de la nanotecnología incidirán en la industria alimentaria y podrán aplicarse de diversas maneras en los productos de consumo.
La tecnología, ya aplicada en el envasado de los alimentos precisa -según la Organización Mundial de la Salud (OMS)- que se evalúen los posibles riesgos sanitarios y ambientales de los nanomateriales antes de incorporarlos a los alimentos, y que se formule y aplique una estrategia de comunicación sobre la nanotecnología y los alimentos.
La OMS apuesta por mantener un debate abierto sobre los beneficios y riesgos de la nanotecnología aplicada a la alimentación.
En la medicina, la nanotecnología también permitirá la creación de órganos artificiales, con la importancia que esto tiene en la salud de las personas. Con este tipo de innovaciones tecnológicas se consigue manipular estructuras y propiedades a nanoescala: manejar células, virus o incluso piezas de ADN. Para ello, se utilizan robots y herramientas de tamaño microscópico que permiten reconfigurar el organismo.
La nanotecnología ya se utiliza para fabricar vendajes y textiles quirúrgicos, además de crearse órganos artificiales
Aunque no a nivel de nanométrico, la reducción del tamaño de implementos en tratamientos médicos está avanzando grandemente. En 2015 se presentó a la comunidad científica un novedoso sistema de marcapasos sin cables, que supone una décima parte del tamaño de uno tradicional.
Este nuevo dispositivo incorpora la tecnología más avanzada en gestión del ritmo cardiaco y se coloca directamente en el corazón, mediante un catéter insertado a través de la vena femoral. Una vez colocado, el marcapasos queda enganchado a la pared del ventrículo derecho y puede recolocarse, si el profesional médico lo estima necesario. INS
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