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José J. Taboada de Jesús aseguró que hay dejadez y una falta de compromiso serio para atender los reclamos de los miembros de la fuerza policiaca. Inter News Service
San Juan, 8 nov (INS).- El presidente de la Asociación de Miembros de la Policía de Puerto Rico, José J. Taboada de Jesús, aconsejó a los líderes del gobierno, tanto del ejecutivo como del legislativo, que tomen en serio los reclamos con relación al retiro de los integrantes de la fuerza policiaca.
Esa organización, recordó, fue pionera en declarar un paro laboral en la Policía, el cual pasó a la historia como la primera gran manifestación del descontento por las pésimas condiciones de trabajo y salarial.
“Hay que recordar que para el año 1991 la fuerza policiaca estatal se dio a respetar con el paro más grande de la historia de ese cuerpo. Los compañeros apoyaron nuestro reclamo provocado por el sueldo básico de 600 dólares que devengaba un policía”, planteó Taboada de Jesús.
Para esa época la Asociación de Miembros de la Policía solicitaba un incremento salarial no menor de 1,000 dólares, a lo cual se opuso la administración del gobernador Rafael Hernández Colón.
Las luchas en la Policía tienen su propia historia, por lo que cuando el coronel Jorge Collazo Torres se desempeñaba como director del Cuerpo de Bomberos, y en ocasión de la inauguración del Cuartel de Bomberos en Caguas, “logramos desarrollar el piquete más grande contra una actividad de un gobernador”.
En esa ocasión, según Taboada de Jesús, sobre 300 agentes provenientes de todo el país, motivados por la consigna “sin miedo”, se reunieron en Caguas para protestar por la baja compensación salarial.
“A raíz de esa protesta se tomaron medidas disciplinarias contra los compañeros manifestantes, sin embargo, eso no detuvo a nadie, por el contrario, se fortaleció el deseo de reclamar lo que era tan necesario, una mejora salarial para el policía”, señaló el presidente de la Asociación de Miembros de la Policía de Puerto Rico.
El jueves 25 de abril de 1991 pasó a la historia como el primer obstáculo salvado ante represalias del patrono, ya que se declaró el paro más grande de la historia de la Policía, cuando miles de sus miembros paralizaron las labores en el país y sindicalistas los acompañaron con la caminata-protesta más grande que se ha dado para reclamar los derechos de los policías.
“Recordamos el cierre de más de 25 cuarteles de la policía en el área metropolitana como lo fueron, Puerto Nuevo, Hato Rey, Rio Piedras, Parada 19, Puerta de Tierra, la Unidad Turística y decenas de cuarteles en toda la Isla. No podemos olvidar la actitud negativa del entonces superintendente de la Policía Ismael Betancourt Lebrón y del propio gobernador Rafael Hernández Colón, quienes amenazaron con sanciones y despidos masivos. Aun así, los compañeros respondieron, al punto que la prensa mundial cubrió esa protesta”, narró Taboada De Jesús.
El dirigente de los policías asociados expresó que hay una dejadez y una falta de compromiso serio para trabajar en forma urgente los reclamos de los miembros de la fuerza policiaca.
“Los compañeros del sistema de seguridad pública deben recordar que la Ley 257 que finalmente se convirtió en la Ley 81 (Ley de Máquinas de Juegos de Azar), debería consignar el 45% del dinero recaudado por las máquinas de videojuegos para el fondo de retiro de los Policías. La intención del legislador que aprobó esta ley es clara, el monto total del recaudo se divide entre gobierno-municipios, empresa operadora y un 5% para la Operación de la Comisión de Juegos”, detalló.
Taboada de Jesús aclaró que “duele decir que hasta el momento el gobierno no ha cumplido con la instalación de esas máquinas, tampoco con el envió del dinero al fondo del Retiro de los Policías”.
“Si se hubiera cumplido con la intención del legislador al aprobar esta ley, el Fondo de Retiro para los Policías tendría ya cerca de 26 millones dólares, cantidad que puede aumentar dependiendo del éxito del proyecto de las máquinas de videojuegos”, reclamó.
Taboada de Jesús afirmó que “nos preocupa el silencio de los municipios y de sus alcaldes, que también serán beneficiados por esta ley”.
“Hacemos un llamado a la legislatura, al gobernador de Puerto Rico y a la Comisión de Juegos de Puerto Rico para que de ninguna manera dilaten el establecimiento de estas máquinas que traerán una aportación al Sistema de Retiro de los Policías”, insistió el presidente de la Asociación de Miembros de la Policía de Puerto Rico. INS
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