R. Dominicana-Jurista asegura que quedan en el terreno de la inviabilidad todos los acuerdos suscritos entre los presidentes Jovenel Moïse y Luis Abinader

Wilson Gómez Ramírez, presidente del Instituto Duartiano. / Inter News Service

Santo Domingo, 25 jul (INS).- El presidente del Instituto Duartiano, abogado Wilson Gómez Ramírez, aseguró que con el asesinato por parte de un grupo armado del presidente Jovenel Moïse, acontecido el 7 de julio en Puerto Príncipe, “quedan en el terreno de la inviabilidad” todos los acuerdos que suscribió con su par dominicano Luis Abinader, en enero de este año.

Gómez advirtió que la inestabilidad política, así como otros problemas que confronta Haití, afecta la soberanía de República Dominicana.

Indicó que la inviabilidad de esos convenios era previsible, porque había una situación de falta de legitimidad del fenecido gobernante haitiano, con los cuestionamientos a que éste estaba sometido y las confrontaciones que se producían, lo que era evidente que eso no se iba a cumplir.

El jurista recordó que meses antes del magnicidio había una demanda de elecciones en el menor tiempo posible, que era el principal punto del conflicto que se advertía.

“Ahora uno no sabe si lo ocurrido fue como consecuencia de la resistencia del presidente Moïse a hacer esa convocatoria a elecciones o si fue por el hecho de que se estaba procurando hacer el referéndum, o si realmente obedeció a otras razones”, explicó Gómez Ramírez.

Además dijo que “no hay certeza ni claridad, y esos acuerdos corrieron la suerte de la situación que se ha generado” y señaló que nadie puede, en un país donde no hay institucionalidad ni criterio de continuidad del Estado, creer que esos pactos tendrán continuidad.

“Eso quedó ahí, en la buena fe y las buenas intenciones que siempre ha tenido República Dominicana, pero sin suerte para que haya una correspondencia entre esa buena voluntad, ese deseo de los dominicanos con relación a los amigos y vecinos haitianos”, argumentó.

Aseguró que ninguna otra nación se ve en riesgo por lo que sucede en Haití, “salvo el caso de nosotros, que compartimos frontera terrestre con el convulsionado país”.

Entrevistado por el periodista Héctor Herrera Cabral en el programa D’Agenda, que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el letrado recordó que ni siquiera la intervención militar de las Naciones Unidas, a través de los Cascos Azules, pudo llevar estabilidad al vecino pueblo.

Sostuvo que esa ocupación “no logró poner en práctica ninguna política importante y, por el contrario, el desorden, la anarquía, el caos y la inseguridad continúan”.

“Pero un país que está todos los días emplazado a la defensa soberana, todos los días, y a cada momento, a quién afecta en términos de su soberanía la problemática haitiana, a la República Dominicana únicamente, a más nadie. Nadie se ve en riesgo, el riesgo real lo tenemos nosotros”, sentenció el profesional del derecho.

Gómez Ramírez expresó que el gobierno nacional no debe desmayar en su reclamo de que la comunidad internacional acuda en auxilio de Haití, tal como proclamó recientemente el presidente Abinader.

Aparte, definió como “algo sorprendente” la gran cantidad de haitianos que vive en el territorio nacional, la mayoría de manera ilegal.

“Aquí hay escuelas en lugares de frontera y semi fronterizos donde el 70 por ciento de los alumnos son haitianos, pero los hospitales están, en una parte apreciable, con sus camas ocupadas por nacionales haitianos, sobre todo embarazadas, con frecuencia en una mayoría importante de ilegales, las calles nuestras y las esquinas principales de las ciudades están tomadas”, detalló.

Valoró de manera positiva que haya una gran cantidad de esos extranjeros trabajando en labores agrícolas y en la construcción, pero que hay una parte que es una carga para el Estado dominicano.

Precisó que los procesos para un extranjero establecerse en el país son rigurosos y exigen que la persona aporte un garante para que no se constituya en una carga para el Estado, “y eso es legítimo en todas las naciones, pero en el caso de los haitianos no hay eso: es una fuerte carga directa para el país”.

“Nosotros, día a día, minuto a minuto y segundo a segundo, estamos luchando por preservar nuestra soberanía”, insistió Gómez Ramírez.

Argumentó que no es fácil para el país estar moviendo constantemente miles de soldados para salvaguardar la frontera, con vigilancia terrestre, marítima y aérea, como está ocurriendo en la actualidad, que eso implica un alto costo en términos presupuestarios. INS

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