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Por Rafael Santiago Medina
San Juan, 6 oct (INS).- Expertos en salud pública de Estados Unidos esperaban que el presidente Donald Trump fuera más responsable e hiciera declaraciones para persuadir a sus seguidores de que el uso de la mascarilla profiláctica para tapar boca y nariz y el distanciamiento físico son esenciales para protegerse a sí mismo y a sus seres queridos ante la pandemia por coronavirus.
Sin embargo, su tuit el lunes desde el hospital militar donde había estado recibiendo tratamiento de última generación para Covid-19 fue volver a minimizar la enfermedad, y aconsejar al pueblo estadounidense a no tener miedo a la Covid-19 y no dejar que domine sus vidas.
Lo peor fue que después de que el presidente Trump llegase ayer a la Casa Blanca en un helicóptero desde el hospital de la base militar, subió las escaleras a un balcón y se quitó la mascarilla para posar para los fotoperiodistas.
Los comentarios en su tuit y la acción del presidente Trump al llegar a la Casa Blanca han provocado la indignación de científicos, especialistas en ética y médicos, así como de algunas personas cuyos familiares y amigos se encontraban entre las más de 210 mil personas que han muerto en Estados Unidos debido a la pandemia.
“Estoy luchando por encontrar las palabras: esto es una locura””, dijo Harald Schmidt, profesor asistente de ética médica y políticas de salud de la Universidad de Pennsylvania. “Es absolutamente irresponsable”.
Por su parte, Fiana Garza Tulip, de 40 años, quien vive en Brooklyn y perdió a su madre a causa del virus, escribió en un mensaje de texto que se estaba “tambaleando” después de leer el tuit de Trump, que describió como una “bofetada en la cara” y un “ doloroso recordatorio de que nuestro presidente no es apto para el cargo y que no le importa la vida humana”.
“Mi mamá, terapeuta respiratoria, no pudo hacerse la prueba en el hospital donde trabajaba, tuvo que buscar un sitio de prueba durante dos días mientras sentía los efectos de Covid-19, no quería ir al hospital dijo que estaba peor allí y que no quería llamar a una ambulancia porque era demasiado cara. Así que se quedó en casa una semana y perdió el pulso tan pronto como los médicos la pusieron en una camilla”, declaró a The New York Times.
Shane Peoples, de 41 años, cuyos padres, Darlene y Johnny Peoples, murieron a causa del coronavirus en septiembre, dijo que los comentarios del presidente eran frustrantes. “¿Está realmente tratando de poner más vidas en riesgo?”, se preguntó.
El doctor William Schaffner, especialista en enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Vanderbilt, en Tennessee, en declaraciones para el prestigioso periódico neoyorkino, calificó el mensaje de Trump de “peligroso”, porque alienta a sus seguidores a ignorar las recomendaciones básicas para mantenerse a salvo. INS
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