Inter News Service Agencia de Noticias
Santo Domingo, 16 ago (INS).- El presidente Luis Abinader advirtió hoy que no habrá impunidad para las acciones de corrupción cometidas por los desfalcadores del erario público en la pasada administración ni tampoco para la que se cometa en el futuro.
Anunció una reforma policial que promueva cambios en la cultura institucional, que impulse la profesionalización de los servicios que los agentes deben ofrecer a la ciudadanía ante la inseguridad que afecta al país.
Al pronunciar su primer discurso como presidente de la República ante la Asamblea Nacional, resaltó que el funcionario que se equivoque con el dinero del pueblo, será inmediatamente destituido y puesto a disposición de la Justicia.
“Estamos convencidos de que la corrupción de arriba incentiva la de abajo, que es la delincuencia, que se traduce en inseguridad. Y ambas tienen que ser combatidas sin tregua”, declaró el mandatario.
Explicó que en el gobierno que inicia hoy, “no se permitirá, bajo ningún concepto, que la corrupción del pasado quede impune, el que robó dinero del pueblo, tiene necesariamente que pagar por sus actos”.
Abogó por un sistema de frenos y contrapesos entre los poderes del Estado, para que ninguno prevalezca sobre otro y que el gobierno debe estar sometido a una fiscalización ciudadana permanente y transparente.
“Eso también es democracia y no sólo la emisión puntual de la expresión ciudadana que representa el depositar una boleta en una urna cada cuatro años”, afirmó.
Insistió en que está comprometido con el pueblo dominicano, “con mi familia y con la memoria de mi padre a encabezar un gobierno trasparente y ético, donde el dinero del pueblo se maneje con total y absoluta pulcritud”.
En su discurso de toma de posesión indicó que la actual crisis por coronavirus obliga a tener un buen manejo del gasto público para paliar los daños que ya sufren los sectores generadores de divisas.
“Todo esto se desencadena en un contexto en el que los niveles de deuda pública, incluso antes de la pandemia, habían llegado a los límites de la imprudencia”, sostuvo.
Dijo que la deuda consolidada de todo el Estado fue duplicada en la última década y que en la última semana el déficit está creciendo en 25 mil 600 millones de pesos (438 millones de dólares).
Luego de anunciar que los programas de ayuda FASE, Quédate en Casa y Pa Ti se mantendrán por el resto del año 2020 y que se extenderán las facilidades tributarias para las pequeñas y medianas empresas. Aseguró que en el pasado no hubo un aumento del bienestar de los ciudadanos, pero sí un incremento de la deuda y de déficit.
“Este es el escenario al que nos enfrentamos hoy. Este es el balance que nos hemos encontrado. Un balance que estamos decididos a revertir”, expuso.
Sostuvo que el dispendio y la corrupción durante años elevaron el déficit y la deuda pública, sin mejorar la calidad de vida de la gente.
Dijo que la prioridad es crear las condiciones para recuperar la producción y el empleo, usando todos los mecanismos que estén al alcance. El plan que empujará el gobierno para los sectores afectados por la pandemia tendrá un monto superior a los 100 mil millones de pesos (1,713 millones de dólares).
Abinader dijo que iniciará un programa de reparación y construcción que impactará a más de 30 mil viviendas, para reactivar las economías locales y prometió impulsar que el Banco de Reservas dé prioridad a los proyectos del sector turístico, industrial y de exportaciones, que creen empleos y que estén detenidos por la falta de financiamiento.
Ataque a la inseguridad
Abinader dijo que “sin ley no hay seguridad, sin seguridad no hay libertad y sin libertad no hay democracia. Y el que tenga la tentación de sacrificar alguno de estos valores para preservar otro, los perderá todos”.
Sostuvo que la inseguridad afecta a miles de dominicanos y dominicanas. El 77% de la sociedad considera la delincuencia como su principal preocupación, y afirmó que ese problema debe ser solventado superando el viejo concepto de orden público, porque las causas de este mal son mucho más complejas y profundas.
“Debemos mejorar y atender la prevención, creando oportunidades que cierren la puerta al recurso a la delincuencia, a la vez que llevamos intensos programas educativos sobre el impacto negativo del alcohol y las drogas entre los más jóvenes”, apuntó.
Y aseguró que “también fortaleceremos las acciones de disuasión, estrechando la colaboración de la Policía con la sociedad a la cual debe servir y proteger. Esto requiere un esfuerzo colectivo tan grande como la meta que queremos alcanzar: un país sin violencia”. INS
mv/aa