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Santo Domingo, 11 ago (INS).- El presidente dominicano Danilo Medina no estará presente durante el primer discurso de Luis Abinader como jefe de Estado, en el acto protocolar de traspaso de mando a celebrarse el 16 de agosto en el Salón de Asamblea del Congreso Nacional, que contará con la presencia del Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y otras personalidades.
Mediante una carta dirigida al Senado de la República, el gobernante explicó que la razón de la ausencia se debe “a la necesidad de mantener los protocolos sanitarios para evitar la propagación del coronavirus en país”.
La información fue confirmada por Ana Jiménez, directora de comunicaciones del Senado de la República, quien destacó que la concurrencia estará reducida a fin de mantener el distanciamiento social y los asientos estarían reservados para los funcionarios del Gobierno entrante.
La pandemia del coronavirus ha causado una crisis en el sector salud del país con más de 81,094 personas contagiadas y 1,346 defunciones, aunque más de la mitad de los afectados ya se han recuperados.
El protocolo que regirá ese día será el siguiente: se abrirá la sesión de la Asamblea Nacional, la ceremonia, y se pedirá un cuarto de tiempo en el que las principales autoridades pasarán al despacho del presidente del Senado, que lo será Eduardo Estrella, en su condición de presidente de la Asamblea Nacional.
El presidente Medina estará en compañía de la vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández.
Una vez concluya el proceso de traspaso de mando, el presidente Medina se retirará y entonces las autoridades presentes volverán a la Asamblea Nacional para retomar los trabajos de la sesión, que incluirán el primer discurso presidencial.
En el salón solo estarán presentes los legisladores electos, familiares muy cercanos y amigos de la nueva dupla presidencial, además de invitados del cuerpo diplomático.
El anuncio de Medina de no asistir a la ceremonia ha causado sorpresa en los medios y diferentes sectores de la sociedad dominicana, ya que será la primera vez en 42 años seguidos de vida democrática, el presidente de la República saliente no estará presente en el discurso del nuevo mandatario, en este caso Abinader.
Se recuerda que luego de la caída de la tiranía de Rafael Leonidas Trujillo, en 1961, el primer traspaso de mando entre presidentes se produjo en el año 1978, cuando Antonio Guzmán recibió el poder de Joaquín Balaguer.
Desde ahí y hasta ahora, la tradición democrática nacional ubicaba siempre al presidente a entregar la banda presidencial y luego escuchar el discurso de su sucesor.
Así sucedió en el 1982, cuando Jacobo Majluta entregó el poder a Salvador Jorge Blanco; lo mismo en 1986, de Jorge Blanco a Joaquín Balaguer; en 1996, Balaguer a Leonel Fernández; en el 2000, Fernández a Hipólito Mejía.
También en 2004, Mejía a Leonel Fernández, y en 2012, de Leonel Fernández a Danilo Medina.
En el caso actual, se da una situación particular. En el año 2016, cuando Medina derrotó a Luis Abinader con un histórico 62% de los votos, el ahora presidente electo nunca reconoció su derrota.
A pesar de esto, la misma noche del 5 de julio pasado, cuando Abinader se alzó con la victoria, Medina le llamó por teléfono para congratularle e invitarle al Palacio Nacional, para coordinar todo el proceso transición de las instituciones.
Desde entonces han coordinado la aprobación de un estado de emergencia por 45 días y han sostenido coordinaciones para enfrentar la crisis del coronavirus. INS
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