P. Rico-Reformulación de la democracia para un radio más amplio (Análisis)

Por Rafael Santiago Medina

San Juan, 4 feb (INS).- La experiencia a través del tiempo y la historia moderna comprueban que es necesario reformular los modelos de democracia, principalmente aquellos que se replicaron de países anglosajones.

Tales modelos de democracia anglosajones adolecen de no ser fielmente representativos de la voluntad y aspiraciones mayoritarias del pueblo, pues validan únicamente la voluntad de los que participan en los sufragios, aunque esa participación sea minoritaria.

Tres casos son evidencia de este aserto: el Brexit del Reino Unido, el juicio senatorial estadounidense que examina un posible impeachment (deponer) al presidente Donald J. Trump, así como su propia elección al cargo de presidente de Estados Unidos a finales de 2016.

En el referéndum celebrado en Gran Bretaña sobre el Brexit, dos terceras partes del electorado no concurrió a las urnas a depositar su sufragio y expresar su voluntad. De todas maneras se validó el sufragio favorecedor por la mayoría de que el Reino Unido abandone la Unión Europea (UE). Estamos en el preámbulo de ese éxodo británico de la mancomunidad europea.

Las encuestas reflejan que la mayoría de los empresarios, de los sindicatos y profesionales en Gran Bretaña se decantan por permanecer en la UE. Muchos electores confundidos que votaron por el Brexit están hoy arrepentidos. Hay consenso en que debiera repetirse el referéndum.

Hubo elecciones el pasado diciembre y los partidos políticos que se opusieron al Brexit o expresaban dudas sobre su conveniencia recibieron el 52% de los votos. Las urnas hablaron y dejaron sentir la necesidad de un nuevo referéndum.

En Estados Unidos, las encuestas indican que la mayoría de los estadounidenses desean que en el juicio de impeachment del Senado se permita el testimonio evidenciario de testigos que puedan ser citados a las vistas. Sin embargo, el líder senatorial de la bancada mayoritaria republicana, Mitch McConnell, lo impide.

Refleja, además, lo defectuoso del modelo anglosajón de democracia el hecho de que en las pasadas elecciones en Estados Unidos, Hillary Clinton obtuvo 65,844,610 votos (48%), en tanto que Donald Trump logró ser favorecido por menos votos: 62,979,636 (46%). No obstante, Trump resultó vencedor en las elecciones presidenciales, gracias a un complicado proceso de elección presidencial.

El presidente de Estados Unidos se elige en una asamblea de 538 compromisarios supuestamente representativos de la voluntad de los votantes en los 50 estados que conforman la nación de Estados Unidos. Esta cifra es igual a la suma de 100 senadores más 435 congresistas y tres delegados de Washington D.C., distrito capitalino que no tiene representación en el Senado. Estos integrarán luego los colegios electorales que elegirán finalmente al presidente de Estados Unidos.

De modo que el voto de los electores estadounidenses no es un voto directo por el candidato presidencial, sino para conformar los colegios electorales y sus compormisarios que serán los que elijan en cada estado al presidente . Cuando los ciudadanos de cada estado de la nación votan en las elecciones presidenciales por un candidato a presidente, lo que hace es dejar saber su preferencia por uno de los candidatos, pero es el Colegio Electoral el organismo que toma la determinación electiva final.

Hay estados de Estados Unidos más poblados que suman en las elecciones individualmente más votos por un candidato que por otro. Sin embargo, la fórmula representativa del sufragio de los compromisarios en los colegios electorales es proporcional al número de senadores y congresistas que representan los 50 estados de la nación estadounidense.

De darse el caso de que ninguno de los candidatos obtenga más de 269 votos electorales, la Duodécima Enmienda a la Constitución entra a regir y el Congreso decide quién será el nuevo presidente.

Así vemos cómo este modelo de democracia anglosajón, en el caso del Reino Unido y Estados Unidos, no representa fielmente la voluntad política del pueblo, sino la preferencia expresada en las urnas, cuando acaecen los eventos electorales, a veces de una minoría movilizada a votar sobre la gran mayoría ciudadana segmentada por sectores que abstienen de sufragar como expresión de su descontento o desilusión con la institucionalidad democrática. INS

ndc