P. Rico-Almacén forzado en Ponce: se trastoca el proceso investigación (Opinión)

Parte de los abastaos abandonados, incluida agua embotellada, por el Nmead en un almacén de Ponce. Inter News Service

Por Rafael Santiago Medina

San Juan, 19 ene (INS).- Se levanta una ola de indignación en el país por el intento de criminalizar la acción justiciera de forzar los candados del almacén de La Guancha, en Ponce, y repartir los suministros a los necesitados por el desastre sísmico que estaban almacenados y dañándose.

Un almacén alquilado por el Negociado de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Nmead) donde se guardaban suministros de emergencia para los necesitados por la devastación del huracán María que no se repartieron.

Suministros que se apilaban en un almacén mientras los damnificados por los terremotos del 6 y 7 de enero pasados los necesitaban urgentemente en los campamentos oficiales e improvisados. O que eran requeridos para personas que acampan en la calle frente a sus hogares que de una u otra manera han sido estructuralmente averiados y que no se atreven a dormir dentro de ellos en las noches.

Pues bien, ahora el Nmead ha radicado una querella por escalamiento al almacén. La denuncia implica que habrá que hacer una investigación policial y radicar cargos criminales contra ciudadanos por el delito de escalamiento.

Porque, según la querella, personas forzaron los candados de las puertas corredizas de metal y accedieron ilegalmente al interior, donde se hallan cajas de agua expirada, artículos de primera necesidad, toldos de FEMA, pampers para niños y adultos, leche y alimentos para bebés, entre otros suministros.

Con la querella se pretende revertir la ocurrencia del delito de prevaricación, negligencia criminal e ineptitud crasa de la oficialidad gubernamental y fijar responsabilidad delictiva en la gente del pueblo que hizo justicia, asumiendo por ellos mismos la responsabilidad de repartir, como era lo adecuado, los víveres y suministros a la gente necesitada por la actividad sísmica.

Entretanto, todo se ha quedado en palabrerías de condena y promesas de una investigación por parte de la gobernadora Wanda Vázquez Garced, y el comisionado de Nmead, Carlos Acevedo, destituido por ella, campea por su respeto en la calle, mientras posiblemente haya primero radicación de cargos y arrestos por escalamiento al almacén contra ciudadanos que la Policía logre identificar en vídeos en las redes sociales y la prensa televisiva, que contra él y la oficialidad gubernamental que cometió el delito de prevaricación por haber mantenido almacenados los suministros, mientras hay una población damnificada por los terremotos necesitada de ellos y un estado de emergencia en el suroeste de Puerto Rico.

Esas son las cosas que acucian desconfianza del pueblo en lo que respecta a la institucionalidad gubernativa y su responsabilidad ministerial. La gente siente que el país carece de gobierno en los momentos de crisis cuando verdaderamente necesita que haya buena gobernanza en la cual confiar.

Quedan muchas preguntas sin contestar en lo concerniente a la prevaricación de las autoridades gubernativas ante las emergencias acaecidas en poco más de los últimos dos años en Puerto Rico.

¿Por qué no haber repartido los suministros a la gente necesitada y preferir que se dañen almacenados por falta de cumplimiento al llamado ministerial de mitigar y atender momentos de crisis con prestancia y diligencia? ¿Es acaso cierto, entonces, como piensa la gente, que en Puerto Rico nos hemos quedado sin gobierno? INS

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