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Fajardo, 13 oct (INS).- El presidente del Partido Popular Democrático, Aníbal José Torres, reafirmó hoy ante la asamblea general del conglomerado político que “los populares seguiremos dando la pelea buena, la pelea limpia, la pelea justa por el pueblo puertorriqueño”, y que para eso es necesario “un país unido, con un partido unido”.
“Para tener un país unido, tenemos que exigir un partido unido. Con espacio para las diferencias, pero con respeto a nuestros postulados. Con nuevas ideas, nuevos estilos, pero con el compromiso de defender a este partido que, con luces y sombras, con aciertos y errores, nunca ha violado la confianza del pueblo para denigrarlo, para renegar su identidad puertorriqueña, su cultura, sus valores y el respeto al servicio público”, acentuó Torres.
“Tenemos que transformar para ganar y sólo unidos lo lograremos. No tengo dudas de que el Partido Popular tiene la capacidad de presentar la mejor propuesta sobre cómo enfrentar la creciente disparidad social y económica que aqueja al país. No tengo dudas de que seremos el partido que sacará a Puerto Rico de esta crisis”, añadió.
Recordó que “al tomar las riendas del PPD sabía que me colocaba en los zapatos de quienes, antes que yo, han dirigido nuestra colectividad. Lo he hecho con gran sentido de compromiso. Sabía y sé que la tarea era dura. Soy consciente de que tengo la inmensa responsabilidad de preservar el legado y las tradiciones que han hecho grande y bueno al Partido Popular, y de que sobre mis hombros recae también la faena de modernizar nuestra estructura y rejuvenecer nuestro ideario”, afirmó.
“No hace falta repetir que el momento histórico que atraviesa el país es el más dramático y sombrío de nuestra historia moderna. La profunda crisis económica que asola la sociedad puertorriqueña despedaza el tejido social desde hace una década y ha llevado a la pobreza a tantas familias. Es una realidad que nos afecta a todos y que debe provocar, en las instituciones del país, una reflexión desapasionada y profunda”, agregó.
Añadió que “el país está cambiando ante nuestros ojos y quienes no estén dispuestos a entrar en sintonía y a escuchar el hondo malestar que vive están destinados a desaparecer barridos por la fuerza de la historia, que reclama cambios urgentes, cambios radicales, cambios verdaderos”.
En cuanto al tema del estatus, Torres señaló: “Quiero serles muy sincero. Este es un tema que nos ha dividido por décadas, que ha afectado y fraccionado a este Partido y que incomoda a nuestro liderato de base. El estatus nos ha acompañado toda nuestra historia. El ELA le ha servido a Puerto Rico. Menospreciar su contribución sería un acto de mezquindad”.
Agregó que “el presente y futuro de su desarrollo tiene que estar anclado en la fuerza y la voluntad de los puertorriqueños. Mis cinco compañeros ayer hablaron del estatus. Para todos y cada uno de ellos el estatus tiene un rol en su visión futura. La base de nuestro partido y Puerto Rico exige que encausemos un posicionamiento claro y de futuro sobre este tema”.
“Nos corresponderá a nosotros los populares, a mí como presidente, al liderato, a estos cinco aspirantes y a cada popular asumir este reto previo a proponernos como alternativa en las próximas elecciones de 2020. Si algo tenemos que aprender es que el resultado de este tema no puede ser uno divisorio. Este reto lo vamos a tomar todos nosotros y los vamos a hacer para unir voluntades y buscar el progreso de todos los puertorriqueños”, reseñó.
“El Partido Popular que yo presido, escucha. El Partido Popular que yo presido tiene el oído en tierra. En medio de la crisis y la apatía generalizada que reina desde hace años, en medio de uno de los períodos más álgidos de la historia contemporánea puertorriqueña, surgió la manifestación más estremecedora y contundente de la que se tenga memoria”, rememoró.
“Me refiero a lo que ya se conoce como el verano de 2019, meses en los que el país se lanzó a las calles para comunicar su hastío y marcar sus límites. La política puertorriqueña no será igual a partir de ahí. El país no tolerará, ni en el gobierno ni en los partidos, la ambigüedad moral ni la debilidad ética. Eso es bueno para Puerto Rico. Y lo que es bueno para Puerto Rico es bueno para el PPD. Esa es mi convicción”, apuntó.
A su juicio, “ni el pasado está muerto, ni está el futuro escrito. Aquí nos hemos convocado para cambiar el mañana. Por más de ochenta años, este partido ha sido el instrumento de la voluntad creadora de nuestro pueblo. Porque en el Partido Popular sabemos que la fuerza del país está en el país”.
Torres aseveró que “para fortalecer al PPD hay que ser sinceros y críticos dentro del Partido Popular. Sólo la crítica que construye puede hacer germinar las nuevas ideas. Somos una casa donde habitan personalidades diversas y visiones de país distintas, pero complementarias. Nos unen, eso sí, el afán de justicia social y un profundo amor por la nación puertorriqueña, por nuestra cultura”.
“Aquí cabemos todos, pero que quede claro de una vez que aquí no caben los embaucadores, los mercaderes, los traficantes de esperanzas, los buscones. En esto soy y seré intransigente: el país alcanzó su cuota de tolerancia con los políticos inescrupulosos y con quienes entran a los partidos políticos para hacerse ricos”, afirmó.
“Tenemos que ser valientes y reconocer que el cambio es un proceso constante y saludable, lo mismo en los hombres y mujeres que en las naciones. El fortalecimiento de nuestra institución y su pertinencia cara al futuro se juegan en esta coyuntura. Si algo demostró el pasado verano es que el único protagonista es el pueblo, la gente de carne y hueso que no llega a fin de mes, la gente que no puede pagar la luz, la gente que, alejada de los protagonismos, cumple su deber civil”, dijo Torres.
Por último, detalló que el derrotero del Partido Popular entiende que lo que pasó en el verano tiene que responder a cuatro nuevos principios:
1) “Abrir las puertas del Partido Popular: abrir las puertas para garantizar el futuro y relevo generacional. Establecer puntos de encuentro y espacios de colaboración con otros sectores, sin renunciar a nuestras convicciones. Es decir, establecer una alianza al interior del PPD y propiciar encuentros con cada puertorriqueño. Eso fue lo que hizo el PPD en el pasado y lo tenemos que volver a hacer”.
2) “Modernizar nuestra estructura para hacerla más inclusiva y participativa. Remodelar nuestra presencia en las redes tecnológicas y actualizar nuestro discurso político. El Puerto Rico de hoy y ustedes, exigen un partido abierto, transparente, participativo y que le rinda cuentas a ustedes. Esto lo tenemos que entender todos los que nos hacemos llamar líderes de este partido”.
3) “Incentivar la diversidad. Garantizar más espacio a los jóvenes, a las mujeres, comunidad Lgbttqi y a las comunidades alejadas de las zonas metropolitanas. La estructura de partido que tenemos nos ha servido, pero es momento de revitalizarlas para así estar a la altura de las nuevas exigencias de la actualidad. Tenemos que erradicar toda modalidad de exclusión en nuestro partido y así ser la mesa de trabajo en la que todos y todas se sientan convocados”.
4) “Sintonía permanente con el pueblo, defender a brazo partido aquellas causas que preocupan a los ciudadanos: la defensa del ambiente, la búsqueda de una economía que sirva a la gente, y no de gente que sirva a la economía, y desde luego, salvaguardar la función de los empleados públicos y de la ética gubernamental”. INS
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