P. Rico-Lamenta Ayala Reyes muerte de maestra a causa del acoso deEducación

San Juan, 28 oct (INS).- La dirigente de Educamos, Eva Ayala Reyes, lamentó hoy la trágica muerte de la docente Mabel Cuevas Santos, de 48 años, que al parecer se privó de la vida en la mañana del viernes en Toa Baja a causa del acoso laboral a que estaba sometida.

“Lamentamos desde lo más profundo de nuestros sentimientos la muerte de la compañera maestra, causada, según declaraciones de sus familiares, por el acoso y hostigamiento laboral”, expresó Ayala Reyes.

La dirigente de Educamos aseguró que situaciones como las que condujeron a tan fatal consecuencia, ocurren a diario en la mayoría de nuestras escuelas del país, por lo que “hemos denunciado reiteradamente que en el Departamento de Educación se promueven tales circunstancias”.

Explicó que son varios los factores que configuran dicha lamentable realidad, como el constante aumento en la carga de trabajo, agravado por la falta de material, equipo o recursos necesarios.

“Hemos tenido casos donde el maestro ha tenido que dedicar tanto tiempo a su trabajo en su misma casa que el agotamiento ha hecho que tengan accidentes con consecuencias sumamente graves”, afirmó.

También describió en ese ámbito que es constante el acoso al magisterio exigiendo que atiendan grupos en periodo institucional y hora de capacitación alegando que los alumnos no pueden irse a sus casas.

“Se llega así al extremo de asignarles grupos que están fuera de su especialidad convirtiéndolos en maestros sustitutos aparte de tener que atender su grupo regular. Esto ocurre por ejemplo en la Escuela Francisco López Cruz, de Naranjito. La agencia se niega a nombrar el recurso necesario y sobrecarga injustamente al compañero afectado”, detalló la dirigente de Educamos.

Otro aspecto del hostigamiento laboral, dijo, es la utilización de la evaluación como instrumento de castigo y amenazar al docente de acusarle de insubordinación si no ceden ante las amenazas y caprichos del Departamento de Educación.

“En la Escuela Abelardo Díaz Alfaro, de Toa Alta, el director le dio cero en la evaluación a varios compañeros, (lo que) apunta a un caso de represalia contra los compañeros afectados”, anotó.

Ayala Reyes explicó que también se emplea el Programa Montessori para obligar a la maestra/o a especializarse sin contar con los recursos y violentando su derecho por antigüedad.

“Si el compañero no acepta, entonces le saltan el turno, como ocurrió recientemente en la Escuela Juana Colón, de Comerío; en las llamadas escuelas bajo el programa Montessori esto es una práctica común”, aseguró.

La dirigente gremial sostuvo que “casi por cualquier cosa acusan al maestro por maltrato institucional u otro caso sin fundamento y lo sacan de la sala de clase sin el debido proceso, como si representara un peligro inmediato y lo condenan al ostracismo profesional con la aplicación de medidas cautelares que no se justifican”.

También imputó al Departamento de Educación de negar cambio de escuela al docente sin dar justificación.

“Ante situaciones como esa, las entidades que representan al afectado solicitan reuniones para dialogar sobre el asunto y el director o directora se niegan ni tan siquiera a dialogar, por lo que se siembra un sentimiento de desamparo ante cualquier injusticia”, dijo Ayala Reyes al resaltar la continua desvalorización del trabajo del magisterio al someterlos al escarnio público, negándosele la oportunidad de defenderse.

En ese sentido expuso la utilización de la División Legal como pelotón de fusilamiento contra el magisterio, donde la fabricación de casos por parte del patrono es una práctica común, lo que evidencia que el propio Departamento de Educación no tan solo promueve tales circunstancias de maltrato y acoso, sino que es el principal ejecutor de las mismas.

“Ejemplo de esto es el continuo desplazamiento de compañeros de escuela en escuela o de distrito en distrito bajo la amenaza de que si no acepta, entonces se quedarían sin trabajo o el cuadro deprimente de tener que amanecerse haciendo fila bajo agua, sol y sereno para las pruebas de dopaje o para ser atendidos ante una situación causada por el propio Departamento de Educación”, alegó.

Para la portavoz de Educamos, si se quiere resolver y aliviar tales situaciones se tiene que comenzar “proveyendo condiciones de trabajo adecuadas y un mayor respeto al magisterio, que además de ser compañeros y compañeras comprometidos y esforzados, también son seres humanos, algo que el patrono parece olvidar continuamente”. INS

ndc