Inter News Service Agencia de Noticias
Por Obed Betancourt
San Juan, 2 ene (INS).- Los problemas en el servicio de emergencias 9-1-1 pueden ser originados en el uso que le dieron a una de sus principales oficinas, asegura una fuente de la agencia Inter News Service (INS).
Hace un mes La Fortaleza cesanteó al comisionado Héctor Torres, incapaz de mejorar los servicios y, además, colocarse en una posición indefendible por actuaciones en la oficina.
En estos momentos, Torres es objeto de investigación de la Oficina de Etica Gubernamental (OEG) por pagar con dinero solicitado a sus empleados una devolución de salario solicitada por la propia OEG debido a un nombramiento hecho de manera ilegal.
Además, le aumentó el sueldo a su amigo de la infancia Jorge García, a quien nombró subdirector, posición que, según fuentes en el 9-1-1, no hace falta.
García fue despedido del puesto de director de la división legal de la Oficina del Procurador de la Salud durante la administración de Luis Fortuño. En ese momento se adujo que había perdido la confianza del procurador por varios incidentes, entre ellos haber asistido a una fiesta de una aseguradora de salud que era demandada por la propia oficina del Procurador.
García es el actual director “interino” del 9-1-1. Mientras, sindicatos y empleados le han pedido al gobernador Ricardo Rosselló Nevares que designe una persona en propiedad, “que sepa de seguridad y emergencias”.
Un exmiembro de la antigua junta de gobierno del 9-1-1 asegura que fue un error desvanecer la junta en la nueva ley que crea el Departamento de Seguridad Pública.
Ahora, el secretario Héctor Pesquera supervisa directamente siete agencias de seguridad.
Pesquera admitió a la agencia INS que no sabía nada de lo que pasaba en el 9-1-1. No obstante, luego de enterado, tampoco ha pasado nada en la agencia.
Una fuente asegura que la oficina de “Quality” de la agencia fue usada para propósitos politiqueros. Esta oficina monitorea las llamadas al 9-1-1 y establece normas de control y calidad, da seguimiento a los protocolos para asegurarse que las telecomunicaciones se cumplan a cabalidad con las normas y que el tiempo de respuesta sea el requerido.
El dirigente sindical Luis Benítez, de la CWA, que agrupa a los empleados del sistema 9-1-1, ha sostenido que faltan voces de telecomunicadores en la agencia.
La ausencia de personal retrasa la ayuda que pueda brindar el 9-1-1 a los que la necesiten.
Mientras, dijo la fuente en torno la oficina de Quality, “cuando Torres y García llegaron, la convirtieron en una oficina para politiquear, dándole como su principal responsabilidad bregar con la llamada ‘integración de municipios’, pero realmente lo que hacían era sacar citas para que ellos (Torres y García) fueran a los pueblos a reunirse con los alcaldes por media hora, y después irse a beber por los chinchorros del pueblo”.
Ambos dos tuvieron hace un tiempo un problema con el exprocurador de Salud que despidió a García. Estando en Vieques, García lo vio y lo insultó gravemente.
Torres, que estaba con García en “asuntos oficiales de trabajo”, estaba borracho, y era evidente que García también iba bebido, según fuentes presenciales.
García continúa de manera interina en el puesto, aunque Pesquera sostuvo recientemente que lo estaba “evaluando”. La evaluación puede ser igualmente para designarlo permanentemente.
El exrepresentante Torres, del Partido Nuevo Progresista (PNP), mantenía aspiraciones de regresar a la política activa, luego que fuera derrotado en 2016 en sus deseos de convertirse en alcalde de Morovis. INS
ob/ndc