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Vega Alta, 18 jul INS).- El alcalde de Vega Alta, Oscar “Can” Santiago, desmintió las denuncias del presidente de la legislatura municipal, Carlos Malavé, acerca del despido de empleados públicos municipales.
“Como el señor Malavé es uno de los siete u ocho candidatos que aspiran a presidir su partido en Vega Alta, utiliza su posición para hacer campaña política, cometiendo el grave error político y moral de mentirle al pueblo vegalteño. La gente está cansada de la politiquería. Por eso hoy ocupo la alcaldía, porque soy un servidor público y no un político”, argumentó el alcalde.
Santiago aseguró que “es falsa la alegación de que se ha despedido a 40 empleados públicos. A quienes no se les renovó el contrato fue a 19 empleados transitorios por la situación fiscal que estamos viviendo, causada por la eliminación de subsididos por el gobierno central”.
“Es bueno recordarle a Malavé que si alguien rechaza el discrimen político es este servidor, que ha laborado por 21 años en este municipio con alcaldes de ambos partidos y tengo excelentes relaciones con todos los empleados municipales que han sido y son mis compañeros”, añadió Santiago.
Según datos oficiales de la administración municipal vegalteña, al final del cuatrienio pasado el saliente alcalde Isabelo Molina dejó a 80 transitorios sin contrato, de los cuales 31 fueron reclutados por el actual alcalde, siete no se interesaron en trabajar y 42 habían sido declarados no indispensables por la pasada administración.
De los 72 empleados que tenían dispensa, sus contratos fueron renovados en marzo pasado y nuevamente en junio, mientras la realidad fiscal lo permitió.
“Los que recluté lo hice por sus capacidades, sin cuestionar si eran activistas o no de cualquier partido. Malavé debe saber muy bien este caso, puesto que fue parte integral de la pasada administración novoprogresista señalada por la Oficina del Contralor por mantener abusivamente a los empleados transitorios por años y años sin darles permanencia”, aseguró el alcalde.
Finalmente, Santiago Martínez solicitó a Malavé que concentre sus esfuerzos en presentar soluciones y alternativas realistas a la situación fiscal del municipio.
“Hasta el momento lo único que han hecho es aumentarse el presupuesto en 42 mil dólares para satisfacer sus caprichos. Con esa cantidad se podía tener cinco empleados transitorios de cinco horas al servicio del pueblo”, concluyó el ejecutivo municipal. INS
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